Son obras hidráulicas, habituales en el paisaje de las márgenes de los grandes ríos.
Las aceñas o molinos de rueda vertical, se utilizaban para el bataneo de los paños y la molienda del cereal.
Aparecen mencionados ya en el siglo X. La palabra aceña se refiere sólo a una sencilla máquina que se cobijaba bajo los arcos de un puente o de una simple caseta. Siglos más tarde, las construcciones son espectaculares edificios de piedra, dotados de tajamares como los puentes, que agrupan a varias ruedas, unidas por puentecillos llamados "pontones".
En Tordesillas en las márgenes de río Duero, todavía se pueden contemplar, en mejor o peor estado, estas interesantísimas construcciones hidráulicas de origen medieval.
Son seis aceñas y reciben los siguientes nombres:
1. De la Peña
2. So la Puente
3. Postigo
4. Zafraguilla
5. Oslúa o Aslúa
6. Moraleja
